En temas de salud y bienestar, muchas veces usamos los términos sobrepeso vs obesidad como si fueran lo mismo. Sin embargo, aunque ambos reflejan un exceso de peso corporal, representan niveles distintos de riesgo y requieren enfoques diferentes. Entender esta diferencia puede ayudarte a tomar decisiones más informadas y cuidar tu salud con mayor conciencia.
En este blog vas a aprender qué distingue al sobrepeso de la obesidad, cómo se mide, cuáles son sus implicancias y qué podés hacer hoy mismo para mejorar tu bienestar sin caer en la culpa ni en soluciones extremas.
¿Qué Significa Tener Sobrepeso?
El sobrepeso se refiere a una acumulación de grasa corporal que supera lo que se considera saludable, pero sin llegar al nivel de obesidad. Se diagnostica generalmente a través del Índice de Masa Corporal (IMC), una fórmula que compara tu peso con tu estatura.
Cuando el IMC está entre 25.0 y 29.9, se considera que una persona tiene sobrepeso. Esta condición puede aparecer gradualmente, a menudo por hábitos sedentarios, consumo excesivo de calorías o cambios hormonales. Aunque no representa el mismo riesgo que la obesidad, sí aumenta las probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas con el tiempo.
¿Qué Es la Obesidad y Cómo se Clasifica?
La obesidad es un nivel más avanzado de exceso de peso corporal. Se diagnostica cuando el IMC supera los 30 puntos. A partir de ese valor, se considera que el exceso de grasa empieza a comprometer el funcionamiento normal del cuerpo y a elevar los riesgos de salud de manera significativa.
>Además, la obesidad se clasifica en tres grados:
• Obesidad grado I: IMC de 30.0 a 34.9
• Obesidad grado II: IMC de 35.0 a 39.9
• Obesidad grado III: IMC de 40 o más (también llamada obesidad mórbida)
Cada grado implica mayores riesgos, por lo que es esencial actuar a tiempo y con apoyo profesional.
Por Qué Es Importante Diferenciar Sobrepeso y Obesidad
Distinguir entre sobrepeso vs obesidad no se trata de poner etiquetas. La diferencia tiene implicancias prácticas, emocionales y clínicas que no conviene ignorar.
Primero, porque el riesgo de enfermedades es diferente. Las personas con obesidad tienen más probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, apnea del sueño, problemas articulares y ciertos tipos de cáncer. En el caso del sobrepeso, el riesgo es más bajo, pero sigue siendo mayor que en un peso saludable.
Segundo, porque las estrategias de tratamiento no siempre son las mismas. Mientras que con el sobrepeso suele bastar con ajustes en la alimentación y la actividad física, en casos de obesidad se puede necesitar un plan médico más estructurado, que incluya medicación, apoyo psicológico o incluso tratamientos bariátricos. Por eso es clave entender bien la diferencia entre sobrepeso vs obesidad para definir el abordaje adecuado.
Y tercero, porque muchas personas no saben en qué categoría están. A veces creen que tienen solo unos kilos de más, cuando en realidad ya tienen un diagnóstico de obesidad. Esto retrasa la búsqueda de ayuda y genera frustración cuando los cambios que aplican no dan los resultados esperados. Además, etapas como la menopausia, el embarazo, el uso de ciertos medicamentos o cambios hormonales pueden afectar el peso corporal y hacer más difícil reconocer la diferencia entre sobrepeso vs obesidad sin una evaluación médica adecuada.
Cómo Calcular el IMC Correctamente
El IMC se calcula con una fórmula sencilla: dividís tu peso en kilogramos por tu estatura en metros al cuadrado (kg/m²). Por ejemplo, una persona que mide 1.65 m y pesa 75 kg tiene un IMC de 27.5, lo que indica sobrepeso.
Aunque el IMC es una herramienta útil para clasificar el exceso de peso, no lo dice todo. No distingue entre grasa y músculo, ni considera la distribución de la grasa. Por eso es importante complementarlo con otras mediciones, como:
• Circunferencia abdominal: ayuda a evaluar el riesgo cardiovascular.
• Composición corporal: mide la proporción de grasa, músculo y agua.
• Perfil metabólico: incluye glucosa, colesterol, triglicéridos y presión arterial.
Usar varias herramientas da un panorama más claro y realista de tu salud.
¿Cuáles Son los Riesgos del Sobrepeso y la Obesidad?
Tanto el sobrepeso vs obesidad pueden traer consecuencias para la salud si no se abordan a tiempo. Sin embargo, los riesgos aumentan en función de la gravedad, siendo la obesidad la que representa un mayor impacto en el organismo y requiere atención médica más estructurada.
Riesgos del sobrepeso:
• Aumento leve del colesterol o triglicéridos
• Fatiga frecuente
• Dolor de espalda o rodillas
• Mayor probabilidad de progresar a obesidad
Riesgos de la obesidad:
• Mayor riesgo de diabetes tipo 2
• Hipertensión arterial crónica
• Problemas respiratorios (como apnea del sueño)
Además de los riesgos físicos, también se suman efectos emocionales como baja autoestima, ansiedad o aislamiento social, que impactan la calidad de vida.
¿Qué Factores Contribuyen al Exceso de Peso?
Subir de peso no siempre se relaciona únicamente con la comida. Existen múltiples factores que influyen:
• Alimentación desequilibrada: exceso de azúcares, grasas procesadas o porciones grandes
• Sedentarismo: pasar muchas horas sin moverse ralentiza el metabolismo
• Factores genéticos: algunas personas tienen mayor predisposición al sobrepeso
• Causas hormonales: problemas de tiroides, ovario poliquístico o resistencia a la insulina
• Estrés y ansiedad: muchas veces llevan a comer de forma impulsiva o emocional
• Falta de sueño: dormir mal también altera el apetito y los niveles de energía
Identificar qué factores están presentes en tu vida te ayuda a diseñar una estrategia más realista y efectiva.
¿Cómo Empezar a Cuidarte sin Culpa?
Lo más importante es entender que ni el sobrepeso ni la obesidad definen tu valor como persona. Son estados de salud que pueden cambiar si contás con información adecuada, apoyo profesional y motivación interna.
No necesitas hacer todo perfecto. Lo que sí necesitás es empezar con pasos simples y sostenibles:
• Incorporá más frutas, verduras y proteínas a tus comidas
• Tomá agua en lugar de refrescos o jugos azucarados
• Movete todos los días, aunque sea caminando 20 minutos
• Dormí mejor: priorizá un descanso de calidad
• Pedí ayuda si no sabés por dónde empezar
Cambiar no significa restringirte, sino aprender a elegir mejor lo que tu cuerpo necesita.
Busqueda de Ayuda Profesional
No esperes a sentirte mal para pedir ayuda. Si notás que ganás peso con facilidad, te cuesta moverte, te sentís cansado constantemente o tus estudios de laboratorio empiezan a alterarse, hablá con un médico, un nutricionista o un especialista en obesidad.
>El acompañamiento profesional no solo te ayuda a bajar de peso, sino a hacerlo de forma segura, con un enfoque integral que incluya tu cuerpo, tus emociones y tu entorno.
>Estrategias Para Mejorar Tu Salud Según Tu IMC
Si tenés sobrepeso:
• Reordená tu rutina alimenticia
• Aumentá tu gasto calórico con actividad física
• Medí tus avances con indicadores de salud, no solo con la balanza
• Participá en talleres o programas educativos
Conclusión: Lo Que Podés Hacer Hoy
Comprender la diferencia entre sobrepeso y obesidad te da herramientas para actuar con más claridad. No se trata de perseguir un número, sino de cuidar tu salud con acciones concretas, sin caer en la culpa ni en la exigencia excesiva.
Tu cuerpo merece atención, no castigo. Si hoy estás listo para hacer un cambio, empezá donde estás, con lo que tenés y a tu ritmo. Cada decisión cuenta, y no estás solo: hay profesionales y recursos disponibles para acompañarte.
